La vocación es parte de lo que mueve a la docente penquista Militza Saavedra, aspectos que pone en práctica con cada palabra que usa al enseñar a sus alumnos. Pero no solo eso, sino que su pasión por enseñar la lleva más allá, y se la ha jugado por entregar herramientas que le permitan soñar a las futuras generaciones y anhelar convertirse en profesionales.
Eso es parte de lo que permitió a la docente del Colegio Villa Nonguén, estar en un grupo selecto de profesores de todo Chile quienes aspiran a ser reconocidos con el premio Global Teacher Prize, una especie de "Nobel" de la enseñanza. Militza es una de las 20 finalistas a nivel nacional, seleccionada de entre más de 9.500 profesores, y estar entre los cinco finalistas que se conocerán a fines de octubre.
Enseñar y emprender
La propia docente describe el por qué de su nominación, tanto el 2019 por la Fundación Chile País Digital y este año por la propia Global Teacher Prize Chile."Para mí es un reconocimiento, estoy presente gracias al trabajo que realizo en el desarrollo de habilidades de innovación y emprendimiento en etapa escolar. Soy docente, pero he conformado el equipo de innovación en el colegio. Armamos una malla curricular, con las horas de libre disposición que nos da el Ministerio y somos el único colegio en Chile con una malla en torno a innovación y emprendimiento, con distintas asignaturas vinculadas a esa área desde 7° a 3° medio", explica la profesional, y quien pese a ser profe de Artes Visuales, se perfeccionó en el área de innovación y negocios.
"Decidí perfeccionarme en esa área desde mi convencimiento de que innovar y emprender no solo lo puede enseñar la vida, o las universidades en sus planes electivos, sino que estas habilidades pueden ser enseñadas desde la etapa inicial, desde el colegio", resalta Militza, convicción que la llevó a encabezar este proyecto, el que hasta ahora ha dado exitosos resultados.
"Tenemos proyectos que han sido finalistas nacionales en distintas entidades", cuenta la profe, quien comparte en su Instagram (@milisaavedra.cl), parte de los trabajos realizados.
Pero lo más importante, agrega, "es que las expectativas de los niños han cambiado del cielo a la tierra, hoy todos nuestros estudiantes quieren entrar a la universidad a la educación superior. Nosotros tenemos un 96% de vulnerabilidad, y esto es clave para romper el círculo de la pobreza, los niños se dan cuenta de que pueden ser un agente de cambio, y lo sienten hoy, no cuando cumplan 20 o 30 años", enfatiza la profe.