El rubro gastronómico es el que ha recibido el golpe de lleno en esta pandemia. Muchos se vieron obligados a bajar la cortina, pues la autoridad sanitaria impidió el funcionamiento de todo tipo de locales de comidas, afectando a restaurantes, cocinerías y cafeterías.
En Talcahuano algunos se las han arreglado solo con el reparto a domicilio, lo que por cierto no es su especialidad, y los ingresos no representan ni la cuarta parte de lo que recibían previo a la pandemia. Menos ahora que el cordón sanitario les impide llegar con sus productos a comunas vecinas como Conce o Hualpén.
Es por ello que están uniendo fuerzas, a fin de lograr que se les permita reabrir sus puertas, siguiendo todas las medidas sanitarias, las mismas que le permiten al resto del comercio permanecer abierto.
"Mi rubro es cafetería y no tiene repunte. Hemos estado atendiendo para entregar simplemente, pero eso no es mucho", lamenta Mario Villagra, de cafetería Café del Negro, quien al menos ha podido abrir.
Y por lo mismo, dueños de locales gastronómicos del puerto se están uniendo, a fin de solicitar formalmente a la Seremi de Salud se les permita abrir o se establezcan protocolos para ello. "Estoy organizando una agrupación del rubro gastronómico para pedir una audiencia con la Seremi de Salud y establezca un protocolo sanitario que nos permita trabajar. Creemos con todas las medidas, y con un 25 por ciento de espacio a ocupar, se podría. Esperamos que al menos nos digan que lo van a analizar", dice esperanzado el dueño del recinto gastronómico chorero.
En Talcahuano algunos se las han arreglado solo con el reparto a domicilio, lo que por cierto no es su especialidad, y los ingresos no representan ni la cuarta parte de lo que recibían previo a la pandemia. Menos ahora que el cordón sanitario les impide llegar con sus productos a comunas vecinas como Conce o Hualpén.
Es por ello que están uniendo fuerzas, a fin de lograr que se les permita reabrir sus puertas, siguiendo todas las medidas sanitarias, las mismas que le permiten al resto del comercio permanecer abierto.
"Mi rubro es cafetería y no tiene repunte. Hemos estado atendiendo para entregar simplemente, pero eso no es mucho", lamenta Mario Villagra, de cafetería Café del Negro, quien al menos ha podido abrir.
Y por lo mismo, dueños de locales gastronómicos del puerto se están uniendo, a fin de solicitar formalmente a la Seremi de Salud se les permita abrir o se establezcan protocolos para ello. "Estoy organizando una agrupación del rubro gastronómico para pedir una audiencia con la Seremi de Salud y establezca un protocolo sanitario que nos permita trabajar. Creemos con todas las medidas, y con un 25 por ciento de espacio a ocupar, se podría. Esperamos que al menos nos digan que lo van a analizar", dice esperanzado el dueño del recinto gastronómico chorero.