Esta acción fue la última complicación que vivió la empresa antes de tomar una drástica decisión: cancelar la iniciativa que incluía departamentos, oficinas y tiendas, en el centro de la ciudad.
La razón: la “incertidumbre” económica debido a las acciones judiciales que tuvo que sobrellevar. Ciudad del Parque debió enfrentar demandas y recursos en tribunales y en el Servicio de Evaluación Ambiental, pues un grupo de vecinos se oponía al proyecto por los efectos que podría generar en la ciudad.
Así las cosas, Aitué anunció a través de un comunicado que “ha tomado la decisión de no perseverar en el desarrollo inmobiliario Ciudad del Parque, debido a que el escenario judicial que enfrenta y los plazos naturales de tramitación jurídica incorporan una variable de incertidumbre profunda que afectó irremediablemente la sustentabilidad de este megaproyecto inmobiliario”. La constructora anunció además que se desprende del 50% del terreno.
Ante ello, la Junta de Vecinos de Parque Ecuador Norte, ubicada a un costado del proyecto y que se opuso fuertemente a este, afirmó que la decisión “debe ser acompañada por la urgente postergación de permisos de construcción sobre cinco pisos de altura”, en el casco central de la ciudad.
La iniciativa
Hace un año, cuando se anunció el proyecto Ciudad del Parque, parecía la respuesta más adecuada a la demanda de vivienda y espacios comerciales que tiene la capital del Biobío.Este consideraba siete etapas y comprendía departamentos, oficinas y centros comerciales, que se iban a ubicar frente al Parque Ecuador, a un costado de un corredor de transporte público que cruza el centro.
Con ello, el mayor proyecto inmobiliario en la historia de la ciudad buscaba sumar 11 mil metros cuadrados de construcción a una comuna que tiene menos de 300 hectáreas disponibles para su crecimiento y que es el centro de un conurbano que ha duplicado su tamaño en 15 años. Sin embargo, lejos de concretarse, la iniciativa se convirtió en el ícono de un encendido debate local sobre las bondades y perjuicios de la densificación del centro histórico de Concepción, lo que terminó con su cancelación.